Siempre se ha dicho que el matrimonio es para toda la vida, que no puede destruir nada cuando la pareja está enamorada y que el amor nunca se acaba. Pero tú, yo y en general el resto del mundo sabe que eso no es verdad, y el amor se acaba. La pregunta es cuándo.
El amor es un estado en que dos personas se encuentran cuando, además de pensar en uno mismo, también piensa en la otra persona y lo hace como un todo, preocupándose no solo por uno sino por la otra persona, queriendo que esté bien, que esté feliz y se sienta bien. Eso podríamos decir que es el primer nivel del amor.
El siguiente sería el hecho de no querer separarse de él o ella, querer compartir con esa persona su felicidad y estar juntos, quizás no siempre, pero no poder pasar tiempo sin estar a su lado es difícil para ellos.
Entonces, si todo eso es el amor, ¿cómo puede ser que el amor se acabe? Los expertos comentan que los primeros sentimientos que se tienen son de “borrachera de amor”, momentos en que estás tan enamorado que puedes estallar. Pero, después, decae, bien porque las personas se acostumbran a a la relación y ya no la ven como tal, bien por otro motivo.
En esos casos es cuando las cosas pueden variar mucho. Puede haber infidelidades, puede haber un asentamiento (rutina que es bien sostenida), o simplemente puede acabarse el amor, como si no vieras a tu pareja como algo importante, sino como un amigo o una amiga a quien quieres mucho pero no para pasar tu vida entera con ella.
El hecho de que se pierda pasión en una pareja no significa que se pierda el amor sino que se pasa a otra fase, que sería la del afecto, ternura, apego, pertenencia, seguridad, compañerismo y aceptación.
