CONSEJOS

Juguemos con el semen, no seamos remilgadas (I)

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En una relación sexual plena, el culmen es el orgasmo, y con él, en el caso de los hombres, es la aparición del semen (en las mujeres hay mayor lubricación y, en algunas, hasta la eyaculación femenina).

El semen es uno de los resultados de un buen polvo, o una buena masturbación. Muchos lo consideran algo pegajoso y asqueroso y van corriendo a lavarse, mientras que otros han descubierto que es una gran fuente de juegos.

¿Cómo? ¿Que no lo sabías? Pues ya puedes tomar nota de ello porque te vas a quedar encantada con ello.

Y es que el semen tiene muchos otros usos además de servir para introducir los espermatozoides en la mujer. Puedes utilizarlo como crema nutritiva para el rostro, como condimento, y muchos otros usos que se le han dado.

Hay algunos estudios que hablan de que el semen contiene hormonas que son absorbidas por la vagina, el ano o la boca y que proporcionan felicidad a la persona en sí. Si a eso le sumamos que el tacto, el olor o la sensación también puede influir, estamos ante un producto que no se ha conocido al 100%.

En general, para jugar con el semen debes tener en cuenta lo siguiente:

  • El sabor. Puede ser desagradable, sobre todo para algunas mujeres. El sabor del semen depende del hombre, de su alimentación, ejercicio, vida diaria. De esa manera podrá saber más o menos dulce.
  • El olor. El olor al semen, y al sexo, es muy característico, pero no todas las personas se dan cuenta de ello. Es por eso que, según la pareja, podrás excitarte más o menos con ese olor.
  • La cantidad de semen puede ayudarte a tener más o menos juego sexual. Pero ojo, no te fíes de esos vídeos que circulan donde los hombres eyaculan una gran cantidad y tu pareja no. A veces, no son más que trampas que hacen fingiendo que eyaculan más.

Dicho todo esto, seguro que te pica la curiosidad por saber a qué podrías jugar con el semen. Pues bien, eso te lo contaremos en un próximo artículo.

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