Vamos a coger una página de alguna novela erótica donde tengas una escena erótica de la pareja. ¿Te das cuenta de cómo son capaces de detallar hasta el más mínimo aspecto de esa escena. De la pareja, del ambiente que se destila, de cómo el hombre roza a la mujer, o cómo la mujer le devuelve las caricias.
Todo eso que a menudo hacemos de forma inconsciente, forma parte de la seducción y los escritores lo saben. Ellos son capaces de hacer que una relación sexual se envuelva en un halo mágico y exótico, tanto que piensas que jamás podrías llevarlo a cabo (cuando en realidad es posible que lo estés haciendo). Se trata, simplemente, de cambiar el chip y lograr que todo esté a favor de un sexo como jamás antes habías tenido.
Y en eso hasta el Feng Shui puede ayudar. De hecho, aquí te vamos a dar unas claves para conseguirlo:
- Según la astrología, el lugar indicado en un dormitorio para que la energía de la armonía, la asociación, el sexo, el romance y el amor se asocien, dependerá de la pareja. De manera general, es la zona derecha del dormitorio donde se debería crear.
- Es conveniente limpiar el área antes de iniciar el sexo. Hay que eliminar de ella la suciedad, el polvo y las plantas muertas.
- También se deben colocar lámparas, velas etc. que envíen un mensaje para purificar y al mismo tiempo armonizar el lugar. Colocar un cuarzo rosa potenciará esa energía positiva ya que hablamos de una piedra del amor.
- Elimina cuadros y fotos negativas. Son imágenes de otras relaciones o imágenes que puedan representar tus gustos. Se trata de colocar imágenes en el dormitorio sobre lo que quieres de verdad, no los ideales que tienes ya que, muchas veces, estos no son realistas y lo único que consigues es dar una imagen equivocada.
- Busca un color rojo para la sexualidad en los dormitorios. También se pueden utilizar tonos azules pero se usan más para buscar la calma, o el verde, que se centra en el corazón y la prosperidad. No es adecuado utilizar colores tierra o marrones en esas habitaciones porque cortan la energía.
Con todo esto, ¿te animas a cambiarte al feng shui?
