Muchas veces ha habido noticias en las cuales una persona ha fallecido mientras tenía sexo a causa de un infarto, o repentinamente. De hecho, cuando se llega a cierta edad son muchos los amigos que dicen que es mejor abstenerse del sexo porque te puede dar algo en el corazón y quedarte en el sitio.
Lo cierto es que el corazón, mientras se mantiene sexo, así como en el culmen, en el orgasmo, sufre porque se aumentan los latidos. Pero, ¿cómo se comporta el corazón en esos momentos? Vamos a hablar sobre ello.
Para que te hagas una idea, la curva cardiaca en los momentos del sexo va elevándose, según como se tenga el sexo, por supuesto. Si hay más preliminares el pulso cardiaco se va incrementando poco a poco, lo cual es bueno porque el cuerpo, y el corazón mismo, se va a adaptando a ese cambio gradual y le da tiempo a responder de manera adecuada. Sin embargo, debes tener en cuenta que, cuando se llega al orgasmo, puede haber una pulsación de 148 o más, frecuencia que va bajando lentamente en los segundos siguientes, pero que puede poner en riesgo la vida de algunas personas, sobre todo aquellas que no suelan hacer ejercicio a menudo y tampoco mantengan relaciones sexuales habitualmente.
Por supuesto, debemos decir que cada persona es diferente. Se han llevado estudios sobre la frecuencia cardiaca en el momento del coito y en el orgasmo pero éstos obtienen valores muy diferentes y es que cada persona tiene un ritmo cardiaco diferente porque, aunque en realidad tenemos el mismo corazón todos, se comportan de manera muy diferente unos y otros y es algo a tener en cuenta. Ni siquiera los expertos saben a qué puede deberse, sobre todo en el caso de las mujeres que son las que experimentan cambios diferentes en cuanto a pulsaciones y tienen picos en la relación sexual.
Lo que sí está claro es que el corazón se acelera con el sexo y el orgasmo, llegando a los 148 o incluso superándolo en algunos casos y hay que estar pendiente de los síntomas no vayas a tener un problema mayor por un momento de placer.
