Uno de los temas más difíciles de pedir información, porque se supone que es algo íntimo y que, además, debería saberse desde siempre, es la correcta higiene genital de la mujer. Muchas veces las mujeres, al orinar, pensamos: ¿me tendría que lavar cada vez que voy al baño? ¿Y si tengo olor corporal cómo lo elimino? ¿Si noto olor quiere decir que puedo tener una infección? ¿Dependiendo del color de la orina puedo saber si estoy bien o no?
Bueno, ante todo espera y deja de hacerte preguntas. La higiene genital es muy importante tanto en la mujer como en el hombre, y conviene que, desde pequeños, se inculque para que sea algo normal y de diario. De esa forma evitarás infecciones de orina, problemas genitales o incluso a darte cuenta antes que nadie de que hay un problema.
La higiene en la mujer
Como mujer, debes tener en cuenta lo siguiente:
Es recomendable que te limpies y laves después de ir de vientre. Esto se debe a que hay que evitar que los gérmenes del ano te puedan provocar una infección. En los demás casos, puedes lavarte con un jabón neutro todas las mañanas y, si te sientes mejor, cada vez que vayas al baño a orinar, puedes limpiarte pero solo con agua.
Toma baños diarios para limpiar toda la zona. Aunque no lo creas, ahí abajo también se suda y es bueno sanearla. Si además tienes la menstruación, es recomendable que tomes duchas o baños regulares porque te aliviarán, salvo que se te corte la regla o te sientas mal, por supuesto.
No uses desodorantes vaginales durante la menstruación. Aunque te fastidie porque sientas que hueles. No son recomendables y es mejor evitarlos.
Tras el coito conviene que te laves, pero no porque así vas a impedir quedarte embarazada o no tener una ETS, no, es a nivel higiénico, porque lo necesitas. Si usas un lavado vaginal o algo similar, no solo no vas a conseguir que sea un método anticonceptivo, sino que destruirás tu flora vaginal y aumentarás la posibilidad de contagiarte de una ETS. Con lavarte con agua y jabón es suficiente.