Cuando eres sexualmente activa también tienes más posibilidades de contraer una enfermedad si no tomas en cuenta las precauciones necesarias. Y es que el sexo está muy bien, pero siempre con algunas precauciones para evitar problemas, ¿no lo crees así?
Mantener relaciones sexuales está bien pero llegar a un embarazo no deseado seguro que no tanto. Si no fuera eso pero sí una enfermedad de transmisión sexual, menos todavía, ¿a que sí? Pues, como mujer, deberías tener cuidado de estas enfermedades que son las que más atacan a las féminas:
Clamidia. Es una enfermedad que se confunde muchas veces con la infección vaginal porque tiene casi los mismos síntomas: picazón, ardor, secreción anormal, etc. ¿Cuál es la diferencia con la infección? Pues que al orinar hay dolor, mucho.
Herpes genital. Otra de las enfermedades que debes mantener a raya es el herpes genital que se puede padecer sin saberlo. Los herpes pueden salir en los labios y boca o bien en los genitales, a través de los flujos genitales. Puede producir fiebre, ardor genital, dolor en el cuerpo, que salgan protuberancias, etc.
Verrugas genitales. La aparición de verrugas es algo que no te das cuenta hasta que ves que son muchas. Y es que eso puede indicar que tienes el Virus del Papiloma Humano. Es necesario que acudas al médico a revisión porque, aunque no tiene cura, sí necesita un tratamiento para evitar que pase a ser cáncer.
Sífilis. Finalmente, la sífilis es una de las enfermedades más peligrosas que puede haber, ya que puede causar la muerte. Se trata de una enfermedad que se caracteriza por llagas dolorosas en los genitales; salpullido y ardor en el cuerpo, sobre todo en manos, boca y garganta; aparición de tumores; complicaciones como ceguera o parálisis.
Así que cuidado, que ser sexualmente activa también te pone en primera línea para este tipo de enfermedades, y muchas otras. No te juegues tu salud por un polvo.