Son muchos los que celebran el día de los enamorados, o día de San Valentín. Pero también hay muchos que no tienen pareja, o que el 14 de febrero lo ven como algo materialista y comercial y huyen de él porque no les parece justo que haya una fiesta para celebrar el amor cuando este tendría que estar en el aire siempre.
Por eso, hoy te preguntamos, ¿tu pareja es pro-San Valentín o anti-San Valentín?
Las personas llamadas anti-San Valentín se podría definir como aquellas que “odian el día de San Valentín”. No es que odien el amor, ni mucho menos, pero entienden que tener un día en el que, desde mucho antes, ya hay empresas, marcas, centros comerciales, etc. que te meten hasta en la sopa los corazoncitos como si fuera un evento como el de Navidad no lo ven bien. Tienen sus razones, una de ellas muy normal: el amor es cosa de 365 días, no de un único día. Y es que ven que el día de San Valentín parece, para muchas parejas, ser el único día en el que pasan tiempo juntos y disfrutan en pareja del amor que sienten. Pero, ¿qué pasa el resto del año?
Si tu pareja es de esas, aquí te dejamos lo que NO deberías hacer:
- Regalarle un oso de peluche. O cualquier otro peluche, menos si tiene corazoncitos. Salvo que le gusten, claro, pero no específicamente para ese día concreto.
- Mandarle un mensaje romántico el día de San Valentín. ¿Por qué no enviárselo en otra fecha donde la persona vea que realmente quieres demostrarle tu amor y no precisamente porque lo ve en todas partes y es lo que hace la “sociedad”?
- Llevar a tu pareja a un restaurante, centro comercial, cine, etc. que esté decorado con motivo del día de San Valentín. Si puedes, evita esos sitios porque no se va a sentir cómoda y no lo pasaréis bien.
- Hacerle un regalo o felicitarla por San Valentín. Para estas personas eso es no tener en cuenta lo que odian el día, así que cuidado, porque el día del amor puede convertirse en una guerra de pareja.