Normalmente, cuando hablamos de sonidos en la cama, casi siempre nos viene a la mente una mujer gimiendo, o gritando. Parte de la culpa de esto lo tiene el cine y la televisión porque siempre enseñan en las escenas de cama que es la mujer la que tiene que gritar cuando llega al éxtasis. Pero seguro que en la realidad tu pareja también hace ruido, aunque sea poco.
Como ocurre con las mujeres, hay hombres que serán más ruidosos que otros a la hora de llegar al clímax. Sí es cierto que, por norma general, son menos ruidosos que las mujeres pero, ¿sabías que esos sonidos del hombre se pueden interpretar? ¿Y que según lo escuches podría ser que lo esté pasando bien, que esté fingiendo o que no le haya gustado nada?
Pues sí, hoy vamos a hablarte de los sonidos del hombre en la cama y de lo que puede significar cada uno de ellos, o al menos los más comunes.
- Escuchas la respiración. Si lo único que escuchas es su respiración agitada, entonces puede ser que tu hombre sea tímido, o bien machista. Muchos hombres suelen callarse cuando hacen el amor, no porque no disfruten, sino porque piensan que no es lo adecuado y para ellos es mejor escucharte a ti gozar.
- Gruñe. Si tu hombre gruñe, ya puedes darte con un canto en los dientes. Es una persona muy segura de sí mismo e intensa. Él quiere que disfrutes tú pero también buscará su propio orgasmo e intentará que sea a la par.
- Gemir no es lo mismo que gruñir, es algo más sensual y muchas mujeres, cuando lo escuchan, se pueden excitar más. Pero cuando un hombre gime puede ser que no sea tan bonito como parece porque esa persona está centrado en su placer y es posible que te sientas desplazada porque él consigue lo suyo pero no se preocupa por lo tuyo, al menos en ese momento.
- Te retransmite lo que pasa. Si te va contando lo que hace, lo que pasa, no es porque piense que no lo vives, es solo que considera que, igual que ocurre en las novelas eróticas, también te vas a encender tú.