Seguro que en algunos otros artículos te has dado cuenta de que hemos citado lo de la palabra de seguridad. En varios hemos hablado de que “rojo” es una palabra que finaliza cualquier acción que se esté haciendo en ese momento y acaba de inmediato con el juego, pero, ¿cuáles son las palabras de seguridad.
Una palabra de seguridad es algo que la sumisa utiliza como instrumento para decirle a su dominante si el juego, si la sesión, va bien, está acercándose a su límite o necesita parar. Para ello se utiliza unas palabras como si fuera un semáforo, a saber:
Verde: cuando la sesión va bien y lo que le hace el dominante es algo que puede tolerar y que le gusta en la intensidad en que se lo da.
Amarillo: cuando la sesión va bien pero la sumisa no puede aguantar más dolor o necesita que el dominante vaya con cuidado porque se está acercando a su límite y puede empezar a ponerse nerviosa. En estos casos la decisión de seguir, bajar el nivel o parar es decisión del dominante que debe velar por la sumisa, ante todo.
Rojo: cuando la sesión ha sobrepasado a la sumisa. Es un momento de tensión porque la sumisa llega al límite, o incluso lo rebasa, y puede sentirse dolida o mal psicológicamente con lo que el dominante debe detener de inmediato el juego y calmar a la sumisa, además de hablar de lo que ha ocurrido.
No es adecuado que una persona sometida llegue a decir esta palabra pues el dominante ha de anticiparse a ello. Sin embargo, los dominantes también son humanos y pueden equivocarse o no darse cuenta.
Dentro del BDSM hay también otras palabras que pueden ser consideradas clave, o incluso entre las propias parejas crear palabras clave pero, los colores del semáforo son palabras universales dentro del mundo de la dominación y sumisión y permiten que, en caso de que necesite auxilio la sumisa, otros Amos puedan acudir a su rescate si el dominante que tiene no se detiene.
