La palabra sexólogo es algo que intimida a muchos, tanto a hombres como a mujeres. Sin embargo, puede ser la figura perfecta cuando tienes algún problema de carácter sexual.
Ahora bien, acudir a un sexólogo es todavía una asignatura pendiente para muchos que se resisten a consultar sobre sus problemas sexuales y prefieren evitar hablar de ellos o pensar y encubrirlos de cualquier manera.
Según los datos de que se dispone, las mujeres tardan una media de 6 meses en acudir a un sexólogo mientras que los hombres tardan hasta 5 años en acudir a un profesional de esta categoría. Esto provoca retrasos en los tratamientos que podrían llevar a cabo y que solucionarían rápidamente los problemas. Aún así, son muchos todavía los reacios a acudir a sexólogos porque ven los temas relacionados con el sexo como algo tabú y de lo que no se puede hablar con cualquier persona, aunque sea un profesional.
Entre los problemas que te puedes encontrar para acudir a un sexólogo están:
- Rutina o falta de pasión y deseo. Un sexólogo puede ayudarte a recuperar esa chispa que se ha perdido con apenas unas sesiones rediseñando la idea que se tenía de lo que es una relación sexual.
- Problemas del hombre o de la mujer para mantener relaciones sexuales. En general, de todo tipo. Un sexólogo puede ayudar a través de tratamientos o consejos a que una pareja puedo realizar el acto sexual sin estrés ni dolencias.
En general, el tratamiento de un sexólogo solamente llega hasta las 10 o 12 sesiones, no se producen muchas más y hay que tener en cuenta que la consulta de un sexólogo llega a ser mucho más barata que la de un abogado.
Por todo esto, no estaría de más acudir a un sexólogo quitándonos todos esos tabúes y fortaleciendo el vínculo de la pareja ya que es la persona adecuada que puede ayudar cuando hay un problema en la relación sexual.