No es cuestión de que te vayas a poner ahora a descalzar a tu pareja para verle el dedo gordo del pie pero si debemos advertirte que, según un estudio de la Universidad de Keele en Reino Unido, los problemas de erección pueden pronosticarse cuando se tiene un problema bastante doloroso en los pies.
El estudio ha sido realizado por un período de 10 años y a más de 40000 hombres, algunos con problemas de gota y otros completamente sanos. Se descubrió entonces que los hombres que tienen gota tienen un 31% más de riesgo de padecer una disfunción eréctil sobre aquellos que no tienen ese problema.
De hecho, los hombres con gota tuvieron un 63% más de probabilidades de tener problemas de erección en el año antes a su diagnóstico y también, como consecuencia de la gota, pueden llegar a padecer artritis, otra de las enfermedades que afectaría a la erección del pene.
Dicho todo esto, no está de más vigilar ese dedo gordo del pie para saber si está en buen estado o, por el contrario, necesita algunos cuidados, ya sea mediante alimentación sana o bien mediante medicación. Ten en cuenta que el pene de tu pareja está en juego y no creo que quieras que sufra de problemas de erección (tampoco él lo querrá).
Ahora bien, ¿cómo se puede conseguir mejorar?
Ejercicio, porque con él mejorará la circulación de la sangre y estará más en forma para cualquier situación.
Alimentación. La gota es un problema que puede aparecer por los alimentos que se consumen, así que hay que vigilar lo que se come para que no llegue a aparecer.
Cuidar la salud. Hacerse chequeos habituales para vigilar en todo momento el estado del cuerpo.
Comunicación. Porque es importante confiar en la pareja y hablar con ella para que, si hay problemas, los puedan solucionar juntos.